Lamine Yamal, la ya superestrella del Barcelona, el niño prodigio nacido en el 2007 y al que ya tratan como un talento generacional y de los mejores, si no el mejor, jugador de su generación (y no es para menos, el chaval es una pasada, es un auténtico abuso contra los de su edad e incluso contra los que son algo mayores también), jugará en el Juvenil A directamente la temporada que viene. Por edad le correspondía jugar en el Cadete A, pero es un talento tal que lo van a poner a jugar con los que son 1, 2 o incluso 3 años mayores.
Obviamente las comparaciones son odiosas y no se pueden comparar tampoco nuestros chavales con alguien como Yamal, pero me gustaría que el Celta apostase también de una forma parecida con los grandes talentos que tiene del 2006, quizás no ser todos titulares ya en el juvenil A, pero si ir entrando en dinámica del mismo. Y de hecho, las bajas que se están dando de jugadores del 2004 o 2005 podría hacer pensar que efectivamente tienen esa idea.