A mí, la clasificación me la pela a la hora de valorar su gestión. O me da igual relativamente.
Pero este clima de estar en conflicto con todo el mundo a todas horas no es sano para nadie. Dudo que sea sano ni siquiera para el presidente.
No puedes estar en constante bronca con el ayuntamiento/alcalde, jugadores, secretario técnico, federación, vecinos, aficionados, etc.
No se puede construir nada con este ambiente.
E insisto en que estamos perdiendo una oportunidad única de ser el equipo referencia del país, aunque sólo sea por incomparecencia de los adversarios.
Tenemos TODO a favor para crecer y construir (deuda, posición en la liga, cantera, base, etc.) y no lo estamos aprovechando porque estamos en guerra constante con todo el mundo.
Una lástima.