A ver, es lógico que mantengan al Chacho. Es un entrenador en el que se supone que confían y tienen buena relación, y que lleva dos temporadas obteniendo buenos resultados (al menos comparados a lo anterior). La situación no es ni mucho menos crítica ni desastrosa visto el calendario. Como dije ayer, el año pasado era incluso algo peor.
Es evidente que palmar 4-1 contra un rival inferior hace daño pero hay que analizar las cosas con la cabeza fría y ese partido creo que todos sabemos que fue un accidente de 25 minutos. Casi todo el foro en el minuto 60 estaba diciendo que no se podía escapar esa victoria porque estábamos rondando el gol de la victoria.
Lo que también está claro es que en estos 4 partidos tiene que conseguir situar al equipo en una posición al menos relajada. Es su reto.
Yo creo que las dudas vienen más por una cuestión de feeling que de resultados.
Si Coudet gestionara mejor sus recursos, si diera oportunidades reales (que no digo siquiera titulares, pero si participación) a gente de futuro como Williot o De La Torre, si tuviera un mínimo de cintura táctica, si se atreviera a cambiar y a probar algo nuevo cuando la cosa no funciona, si no se limitase en buscar excusas ajenas y trabajara variantes, si no tuviera titulares indiscutibles que juegan por decreto, por encima de rendimiento o molestias, si no se pusiera a la defensiva y buscara excusas cada vez que se le pregunta sobre la cantera... estoy seguro que muy poca gente, por no decir nadie, tendría dudas de él. Vamos, es una cuestión de forma de trabajar.
Simplemente hay actitudes y decisiones que no se entienden. Del último partido, por ejemplo.
Palmas 4-1 con el Valladolid, pues que se le va a hacer. Un accidente. No hay que hacer drama por el resultado. Pero luego sales a decir, en una de tus varias excusas, que el equipo acumula cansancio del anterior partido, y aún así pones a los 3 centrocampistas que acumulan más minutos, solo haces dos cambios... Y te quedas con cara de tonto. Son ese tipo de decisiones que no se entienden. Y como esas, tantas. No es una cuestión de resultados.
Lo de desprestigiar o minusvalorar en público a no pocos jugadores de la plantilla tampoco ayuda a simpatizar con él, a mí por lo menos.