Bueno, perry, no he dicho que lo fuera a rechazar, solo que me lo pensaría muy mucho. Sobre todo, ponderando qué cosas podría hacer con el dinero que me pudiese traer para hacerme un lavado de conciencia.
Pero no creo que sea especial en eso. Cualquiera persona normal, con un mínimo de conciencia, que se informe de la mierda que hay en el Golfo pérsico también se lo pensaría. Vivir allá no es un trago de buen gusto y, además, cualquier tontería te puede meter en problemas graves.
Otra cosa es que la gente sea muy inconsciente. A mi me flipa la cantidad de mujeres occidentales que acaban en la cárcel por denunciar una agresión sexual, porque si estás casada es adulterio, cuando es ya vox populi. Y recuerdo siempre el caso de una diplomática canadiense, que iría a denunciar pensando que era especial y acabó en chirona igual sin que pudiese hacer nada el gobierno.
Nadie da duros a cuatro pesetas y los saudís tontos no son.