Creo que ya pasada la vorágine de su hype ( merecidísimo, todo sea dicho de paso ), le toca a él mismo reflexionar y ver que tiene que aportar algo más sobre el campo de lo que hace últimamente. No se le pide que acabe la temporada con 15 goles y media docena de asistencias como iba encaminado, se le pide que arrime el hombro, que pida el balón y que trate de entrar más en juego. Porque lo necesitamos. Toca centrarse y darlo todo en estos cuatro partidos, aunque sea con un perfil más bajo del que tuvo en sus meses dorados, pero el esfuerzo no se puede negociar.