Yo tengo muchas dudas sobre cuál es la mejor solución a estas alturas.
Por un lado, le atribuyo el mérito a Benítez de presentar un equipo que compite en casi todos los partidos, que no le pierde la cara al partido y que debería llevar más puntos de los que lleva hasta ahora. No es el Celta un equipo descompuesto ni muerto ahora mismo. En absoluto lo es. Y, en este sentido, Vallecas dirimirá si se puede confiar en que esto siga así y por fin nos dé réditos.
Por otra parte, las jornadas pasan y seguimos sin ganar. Y eso es por algo. No tenemos un plan B más allá del juego de transición. Cuando hay que proponer, se nos apagan las luces. Además, la gestión de partido es muy deficiente. Jamás gana un partido el entrenador con decisiones tomadas en el transcurso del juego, bien sea a través de cambios o de cambios de sistema. Solo se me ocurre el punto de Anoeta.
Con todos estos ingredientes, mi opción es aguantar hasta Vallecas y ver qué pasa. Si seguimos siendo ese equipo competitivo y puntuamos, le daría hasta Granada. Si contra los nazaríes logramos los tres puntos que no logramos ayer, unido al punto de Vallecas, se puede abrir un horizonte mucho más esperanzador.
Pero claro, todo son hipótesis...