Una cuestión al margen: solemos hablar de ahorrarnos nueve millones de euros si lo aguantamos, y no es así. No los vamos a ahorrar.
Simplifiquemos. Primero, no sé si son nueve millones o no, pero supongamos que ésa es la cantidad que cuestan él y su equipo por dos años, ya que el tercero (Marián dixit) es opcional, de mutuo acuerdo (se supone). En todo caso, eso lo dirimiría un juez de acuerdo con las cláusulas del contrato. La única manera de que nos ahorráramos pagar eso sería porque se llegara a un mutuo acuerdo por menos al despedirlo, cosa que, oyendo a Benítez, suena improbable. En cualquier otro caso, sea porque lo finiquitan, sea porque cumple su contrato, ese dinero se va a pagar. Lo que nos va a costar a mayores y no presupuestado es lo que cueste su sustituto en ese mismo tiempo. Si es Claudio, merecerá mucho, pero seguro que cobrará bastante menos.
Duele soltar nueve millones de golpe (o negociados en plazos, que eso igual podría ser, no sé), pero asumo que la situación financiera del club nos lo permite hacer sin demasiados problemas.
Lo que se me escapa un poco es cómo afectaría eso al LS de esta temporada y las siguientes. Entiendo que al devengarse la indemnización totalmente ahora, sería en ésta en la que nos excederíamos (no necesariamente toda la cantidad tiene que ser exceso) y eso llevaría a alguna sanción/multa/limitación por parte de la LFP. Probablemente eso nos afectase en la que viene aunque, por otra parte, también nos libramos de su ficha. Igual con la venta de Gabri hay margen o si se vende, pongamos que a Larsen, antes del 30 de junio, igual compensamos. En cualquier caso va a haber que hacer una limpia en verano, y no todo se podrá vender recuperando las amortizaciones pendientes para fichar después. Digamos que nos afecta al margen de maniobra para hacer la reestructuración necesaria, y eso ya es bastante malo.
Todas esas cuentas las tienen que tener hechas ya en el club. En todo caso, el error fue, por atractivo que sonara, pagar lo que parece que se paga por un contrato largo a un entrenador como Benítez, tan fuera de nuestra escala salarial (ya no hablo de su rendimiento). Una vez hecho, la soga ya estaba colocada en el cuello.