Lo que está claro es que sin jugadores que sepan mirar hacia delante y tener claridad en campo rival es difícil convertir posesión en oportunidades. No es casualidad que en el último par de años el equipo tuviera una media tan baja de ocasiones claras por partido.
Luca es bueno por su nivel futbolístico, pero también por lo que su perfil representa para el equipo. Cervi quedará para contextos muy concretos de partido, como los últimos minutos de hoy, y además creo que es también muy útil para lo que se le requiere.
Se podrán hacer las cosas todavía mucho mejor en varios aspectos, pero es reconfortante ver que al menos algunas piezas ya van encajando en un orden lógico. Algunas modificaciones parecían desde hace mucho obviedades necesarias, y el tiempo parece dejar claro que efectivamente lo eran.