Para mi es aún mucho más sangrante el caso de Iker Losada. Antes de cerrarse el mercado de invierno y llegar la Lámpara ( Seferovic ), sale nuestro entrenador en rueda de prensa pidiendo un jugador exactamente, milimétricamente, de las características de Losada. Resulta que, casualmente, pasaba por ahí el máximo goleador y máximo asistente del filial, su jugador más decisivo esta temporada... pues ni lo vio ni lo quiso ver. Tardó meses en llevarselo a entrenar y aún ni ha debutado. Es decir, pides un jugador con unas determinadas características, resulta que lo tienes en el filial, y es además, por fortuna, el jugador más determinante del filial, y lo ignoras?, ni tan siquiera lo pruebas?.
En fin, este es el entrenador del Celta. Llegó alardeando de valentía y se irá siendo un compendio de los peores defectos de Coudet y de Escribá. Todo un regalito.