Yo firmo un empate, como también firmaría ser décimos a final de curso. Estoy que ya solo me pide tranquilidad el cuerpo.
Respecto la asistencia, me ha venido a la mente aquella época de regalar entradas constantemente. Mucho abonado se quejaba con razón, pero también olvidando que para mucha gente pagar el abono es un privilegio y, para otra, disponer de tiempo para ir al partido también.
Yo apostaría por un sistema digital a tope: una cuota fija para asegurarte un asiento y recibir un descuento, junto con entradas baratas todo el año que “abonados” también tendrían que comprar en la web o app de turno. Para que hubiese movilidad y la gente de animase más a ir.
A fin de cuentas, el club ya no estabiliza su presupuesto con los abonos, y vivimos una época donde poder pagar un abono y disponer de tiempo y dinero no es como antes.