Óscar Méndez Faro de Vigo 21/12/2021
Eduardo Coudet ya ha escrito su particular carta a los Reyes Magos. Y no es muy extensa. El entrenador argentino es conocedor de la delicada situación económica del Celta, aliviada en las últimas semanas por el acuerdo entre LaLiga y CVC, pero ha pedido un pequeño esfuerzo al club para poder traer un atacante que pueda ayudar a Santi Mina, Iago Aspas y Thiago Galhardo en la delantera. El equipo celeste tiene actualmente todas las posiciones dobladas salvo las de los puntas. De los citados, los dos canteranos son indiscutibles para el Chacho en su equipo inicial, que solo tiene al ariete brasileño -actualmente lesionado- en la recamara. Es por ello que considera prioritaria la llegada de un delantero, no necesariamente el típico jugador de área, que complemente a la terna de atacantes actual.
Coudet ha dejado claro en estos trece meses que lleva en el cargo que no es muy proclive a los cambios de sistema, y en su librillo solo figura la opción de jugar con dos delanteros. Siendo la del Celta una plantilla corta, la polivalencia de muchos de sus futbolistas limita las carencias en algunos puestos. Brais, por ejemplo, ha disputado algunos partidos como segunda punta ante la ausencia de alguno de los delanteros. Pero no deja de ser una solución de emergencia. El técnico de Buenos Aires tampoco está convencido del potencial de los jugadores del filial, que no han sido llamados ante las recientes bajas de Iago Aspas o Galhardo.
Entre los perfiles que mejor podrían encajar en el esquema del cuerpo técnico destaca por encima del resto el de un segundo punta con movilidad, capacidad de asociación y último pase, además de gol. Para el puesto de delantero centro de referencia, capaz de fijar centrales y con remate dentro del área el Chacho entiende que ya tiene a Mina y Thiago en el plantel, aunque tampoco diría que no a un tercer hombre que pudiese jugar con un acompañante por detrás.
El club es consciente de las virtudes y defectos de la plantilla y, al igual que pasó el verano pasado con los nombres que propuso el técnico a la hora de acudir al mercado, tiene muy en cuenta su opinión. Sin embargo, en A Sede ahora mismo solo existe la seguridad de que el jugador que va a llegar en las próximas semanas será el mexicano Orbelín Pineda, a punto de acabar su vinculación con Cruz Azul y que llegará a coste cero tras el acuerdo alcanzado con él meses atrás.
El Celta tiene en su agenda numerosos nombres para el perfil solicitado por Coudet, pero solo acudirá al mercado si se produce alguna salida durante el mes de enero. Además, es habitual que según avancen las semanas aparezcan oportunidades que en los primeros días no son posibles.
Si para que lleguen nuevos jugadores antes tienen que salir otros, Baeza y Okay, que apenas entran en los planes del Chacho, son los dos nombres que el club va a poner en el mercado a la espera de alguna propuesta que satisfaga a todas las partes. Por el primero se espera poder cerrar una cesión, mientras que por el internacional turco se aceptaría un préstamos o una venta.
Un patrón común en los fichajes: con experiencia y que hablen castellano
Desde la llegada de Coudet al banquillo en noviembre de 2020, ocho jugadores han recalado en el conjunto celeste. Los tres primeros lo hicieron en el pasado mercado invernal, cuando Solari, Aarón y Ferreyra se sumaron al resto de la plantilla para la segunda mitad de temporada. Ya con más tiempo, este verano llegaron otros cinco jugadores. Murillo, que volvió de cesión por segunda vez, Galán, Dituro, Cervi y Thiago Galhardo se convirtieron en nuevos jugadores del Celta. Todos ellos ocupan demarcaciones distintas y tienen características diferentes, pero cumplen un mismo patrón: tienen experiencia y entienden el castellano, dos cualidades que para el entrenador argentino son sumamente importantes a la hora de cerrar un fichaje.El técnico da excesivo valor a la comunicación dentro del campo, ya sea en entrenamientos o partidos. Coudet es de los que piensa que durante un encuentro las correcciones y avisos son una constante, y para ello es fundamental que los jugadores estén hablando entre ellos para realizar alguna marca o avisar al compañero en una jugada peligrosa. También es importante para el argentino el hecho de que los jugadores entiendan sus indicaciones, que son en castellano. En la actual plantilla del Celta, formada por 21 jugadores, tan solo Aidoo habla en inglés, aunque desde su llegada a Vigo ha dado clases para aprender el idioma y cada vez se suelta más. Okay, que llegó al club halando turco e inglés, ya entiende y se expresa perfectamente castellano.Otro aspecto importante es el de la experiencia. Todos los jugadores que han llegado en las últimas dos ventanas de fichajes acumulan numerosos encuentros en sus piernas. Incluso los más jóvenes. Solari fichó tras nueve campañas en el fútbol argentino, Ferreyra después de su paso por Argentina, Ucrania o Portugal, mientras que Aarón Martín sumaba casi 150 encuentros entre el Espanyol y el Mainz. También los cinco futbolistas que se incorporaron en verano tienen una dilatada trayectoria en la élite. Lejos quedan ya aquellos fichajes de jugadores jóvenes y semi desconocidos con los que el Celta pretendía crecer deportivamente y sacar rédito económico. Coudet prefiere rendimiento inmediato.