Yo salgo de una gripe A la semana pasada y fui al campo aún renqueante. Entre los restos de la enfermedad, la tensión del VAR, las ocasiones cantadas del Betis y el final apoteósico, noté que me faltaba el aire en un momento dado. Fue una tortura, pero de esas que te refuerzan. Ahora, el pecho aún lo tengo cargado, en cuanto botaba un poco me faltaba el aire, estoy peor de lo que pensaba... Pues eso, que menudo partido. Independientemente del resultado, ayer se les vio a todos muy comprometidos. A unos les saldría mejor y a otros peor, pero el compromiso está ahí. Y es un buen punto de partida. Ahora hay que ir rellenando el resto de los huecos, que todavía hay muchos, no nos engañemos.