El partido empezó siendo un correcalles, y entiendo que eso favorecía a la Real, que es el equipo correoso y veloz, que jugaba además en casa, y no a nosotros, que teóricamente basamos nuestro juego en el control defensivo y la salida a la contra. Quiero decir que eso no me parece que fuera elegido, sino sobrevenido. Sin embargo no salimos mal parados del intercambio de golpes, pudo pasar cualquier cosa, hasta el gol de ellos. En ese momento pusimos a Beltrán de tercer central y el cambio de sistema no lo asimilamos bien, fueron los peores minutos del equipo, hasta el descanso. Ahí con tiempo de hablar para hacer los ajustes y metiendo a un tercer central de verdad, la segunda parte fuimos mejores, con Aspas repartiendo juego, buscando los lugares más complicados para ser detectado por los contrarios y asociándose sobre todo con Bamba. Los laterales mejoraron (buenos centros de Manu, bien Mingueza y tb Cervi cuando le tocó) cosa fácil después de una mala primera parte. A Dotor le vi detalles, Fran tb mejoró, igual que DLT. El cambio de tecla de RB tuvo incidencia positiva en casi todos los jugadores, mejor dicho, en el colectivo. Más grises Larsen y Miguel, cuando le tocó.
Hay que mentalizarse de que hay que competir con lo que hay, que al final es lo que hacen todos los equipos. Buscar la tecla que haga funcionar al equipo como colectivo. Es trabajo a largo plazo y al principio va a costar. Pero es la única salida porque no van a venir fichajazos caídos de un guindo. Esto no funciona así, hay que construir equipo y competir con lo que hay, y si acaso mejorarlo con pinceladas, si se tercia. Pero 11 tíos nuevos no van a venir, y ya que sean buenos,, mucho menos. La base se tiene que hacer con lo que tenemos. Y hasta que lo asumamos seremos la princesa que envejece esperando por un príncipe azul que no llega nunca. Y el tiempo pasa sin aprovechar la oportunidad de vivir nuestra realidad esperando que lleguen otros que lo arreglen. Pero nunca llegan. Competir, competir y competir, con lo que hay, con lo que venga, pero siempre competir.