Hoy empieza la semana 15 de la liga regular. Con ésta, quedan cuatro hasta el final, todas con dieciséis partidos. Ya no descansa nadie, todos han jugado los mismos trece partidos hasta este momento.
En la Conferencia Americana el pescado está bastante vendido. Chiefs y Bills no tienen casi nada que temer en sus divisiones y Chiefs llevan dos victorias de diferencia sobre Bills para asegurarse el número uno. Los Steelers lideran la suya con dos victorias más que los Ravens, pero la semana que viene hay un Steelers-Ravens que lo puede apretar todo. En la división Sur, los Texans también tienen dos victorias sobre los Colts. Lo normal es que Texans consoliden su liderato. Hoy por hoy, los comodines son para Chargers, Broncos y Ravens, todos con 8-5. Colts y Dolphins están a la caza, pero con 6-7. Hay varios partidos cruzados, así que la sorpresa por este lado no es imposible, pero sí difícil.
En la Nacional hay más lío. Los líderes son Eagles, Seahawks, Lions y Bucs. De los cuatro sólo los Eagles tienen casi certificada su división. Curiosamente, los Lions, aunque ya están clasificados para playoffs, no, porque llevan a los Vikings pegados a los talones. La emoción está en las divisiones Oeste y Sur. En la Oeste, los Seahawks (8-5) tienen ventaja de un partido, pero un calendario muy difícil. Los otros tres equipos, Rams (7-6), Cardinals (6-7) y Niners (6-7) no están descartados. En la Sur, pinta que Bucs y Falcons se van a alternar al frente de la división hasta el final, con una pequeñísima ventaja, a la vista de sus rivales (y de que el QB de Falcons es Cousins; tiene pinta de buen tipo que se desinfla bajo presión) para los Bucs. En cualquier caso, en estas dos divisiones la única vía de acceso a postemporada es ganarlas. Los comodines de la Nacional parecen asignados a Vikings -o Lions-, Packers y Commanders, sin muchas dudas.
Con todo esto en la cabeza, vamos con la jornada. Empezamos con un Rams-Niners en San Francisco esta noche, que casi seguro descabalgará a uno de ellos. Si los Rams ganan, apuesto por ellos frente a Seahawks para llevarse la división dentro de cuatro semanas. Si ganan los Niners, creo que no les va a valer de nada por irregulares, pero darán un respiro a Seahawks. En cualquier caso, emoción y rivalidad aseguradas y, vista la exhibición de los Rams frente a los Bills de la semana pasada, la cosa puede ir de puerta grande o enfermería.
Para el domingo, el partido más interesante del turno de las siete vuelve a ser el de los Dolphins, que visitan a los Texans. No hay otra que ganar, Ef, aunque indirectamente beneficiéis a los Colts. Si perdéis, creo que matemáticamente ya se os escapará la opción del comodín que, no nos engañemos, está muy difícil aun ganando. En este turno hay también un Chiefs-Browns en el que la emoción será ver el cuádruple mortal que van a intentar los Chiefs para seguir ganando partidos de la manera más estrambótica.
Drogha dura es el turno de las diez y media. Hay un Patriots-Cardinals para que los de Arizona se mantengan en la lucha por su división. Hay un Bucs-Chargers (apuesto por Chargers), un Steelers-Eagles (apuesto por Eagles, a pesar de la gran rivalidad estatal) y un Colts-Broncos (apuesto por Denver) muy equilibrados, pero todo palidece frente al gran partido de la jornada: el Bills-Lions. Esto es, potencialmente, una SuperBowl. Es la exuberancia y el correr de Allen frente a la sobriedad y clasicismo de Goff. Es la valentía táctica del ataque de Lions frente al a-saber-qué-día-tiene la defensa de Bills. Es el mejor partido que se puede ver en este momento, aunque seguro que los dos equipos se van a guardar cosas por si se vuelven a encontrar en Nueva Orleans.
Después de este partido, cualquier cosa va a parecer poco, pero el SNF es un buen Packers-Seahawks, más comprometido para éstos últimos, aunque juegan en casa, que para los de Wisconsin.
Finalmente, para el MNF quedan dos partidos: por un lado, el Bears-Vikings. Los Bears se presentan con un HC interino en Minneapolis, pero es un partido de rivalidad y no pondrán las cosas fáciles. Además, si los Lions han perdido el día anterior, los Vikings irán a por todas y, si Lions han ganado, también. Ojo: la última semana, en la Noche de Reyes, habrá un Vikings-Lions de regalo. El segundo partido del lunes es un Falcons-Raiders que debe llevar a Atlanta de vuelta al liderato, temporalmente, de la Nacional Sur.