Tampoco es descartable que esto sea la previa de un paso adelante para plantear las catalanas como una especie de referendum sobre él y presentarse como un perseguido. Las encuestas daban al PSC como el partido más votado, si la gente compra el mensaje hasta puede salir reforzado. Lo que ha demostrado hasta ahora es que no es de sentarse a esperar a que lo desgasten, que le gusta más llevar la iniciativa.
Yo creo que la cosa va por ahí. Me he leído hoy "la carta a la ciudadanía" y no deja de ser en su mayor parte una soflama política para la parroquia. En mi opinión si quieres dimitir, dimites, por las razones que sean, pero no montas este número.
Las encuestas tienen el valor que tienen, pero ya ponen por delante a Junts sobre Erc, y a un eventual frente indepe con Puchi de presidente con opciones de mayoria. Me imagino que quieren evitar ese escenario.
Otra opción más conspiranoica es que desde Israel haya llegado algún recado.
Pero la que menos me creo es que se vaya por una denuncia de una organización totalmente desacreditada e irrelevante.
Bastante de acuerdo con lo que exponéis.
Esto suena a toque de corneta para movilizar a las huestes que se muestran apáticas o desencantadas porque "viene la derechaaaaa, viene el fascismoooooooo".
Si algo ha demostrado Sánchez es resistencia ante cualquier tipo de adversidad, ya sea interna o externa, así que elecubrar con una dimisión me parece ciencia fición. De hecho, dudo que exista en su vocabulario esa palabra.
Lo que me llama la atención es la reacción ante una posible investigación a las actividades de su esposa, cuando hay indicios de que tenía relaciones más o menos cuestionables. Desde ataque a la democracia a filofascismo. Por unas diligencias previas de investigación.
Pero oye, que a Rita Barberá hay que condenarla hasta despues de muerta por no se sabe muy bien qué. O Cifuentes dejó la presidencia de una CCAA por meterse una crema de manos en un bolso en una grabación que se guardaba años despues.
Si algo ha quedado demostrado es que la política española es un auténtico estercolero en el que para alcanzar o conservar el poder vale absolutamente todo.
Pretender diferenciar entre "buenos y malos" me parece infantil, pero entiendo que la simplificación ayuda a entender mejor las cosas.
Ahora bien, lo que ya me da asco, y terror, es que esta banda de sociópatas y cleptómanos que tenemos instalados en la clase dirigente azuzen a la población unos contra otros, poniendo etiquetas de buenos/malos, rojos/nazis; progres/fachas con tal de defender lo suyo. Generan un clima irrespirable en el que algún día pasará una desgracia y todos nos preguntaremos despues cómo se llegó a esto. Y a ellos les suda la polla por delante y por detrás las consecuencias. Solo piensan en mantener su sueldo de 100 k mensuales, su despachito, su retiro dorado y sus prebendas.
Si nos tenemos que matar entre nosotros convirtiendo el panorama político en un Barça/Madrid tabernario pues... el fin justifica los medios. En parte es lógico, porque el 99% se moriría de hambre fuera de la actividad política.